Hoy, mañana, o durante los próximos días, un desafío complicado se presentará en tu vida. ¿Qué vas a ver en él? ¿Cuál será tu primera reacción? ¿Lo vas considerar un desafortunado contratiempo, o vas a encontrar en él la oportunidad de crecer y superarte? Hasta aquí, te las has arreglado con cada uno de los desafíos que tuviste que enfrentar. Y a pesar de que muchas veces resultaron complicados, esos desafíos terminaron fortaleciéndote. Ahora, esos desafíos superados pueden contarse entre tus más valiosas experiencias. No permitas que un desafío te intimide. En cambio, mira hacia adelante, más allá de él. Observa y comprende el verdadero valor de animarte y atravesarlo, de subirte a él, de aprender lo que tiene para enseñarte, de fortalecerte lo suficiente como para trascenderlo. Las oportunidades que anhelas vienen encerradas en los desafíos que se cruzan en tu camino. Acéptalos y aprovéchalos lo más que puedas.
No te dejan avanzar, te paralizan de miedo, ponen trabas a cualquier emprendimiento y te impiden disfrutar de la vida. Me refiero a los complejos, esas imágenes distorsionadas que tienes de ti mismo y que pueden convertirse en tu peor enemigo. ¡Aprende a combatirlas!
Los expertos definen los complejos como “pensamientos irracionales”, “percepciones distorsionadas de la realidad” e “imágenes exageradas de uno mismo”, que se originan al compararnos con otros.
LOS COMPLEJOS
- Complejos de Edipo y Electra: El complejo de Edipo se produce cuando el hombre compara a todas las mujeres con su madre y busca sólo parejas que se parezcan a ella. Este mismo comportamiento en las mujeres, pero con respecto a su padre, se llama complejo de Electra.
- Complejo de Peter Pan. Se trata de personas que no quieren enfrentar responsabilidades y se niegan a crecer.
- Complejo de Blancanieves. Siempre necesitan llamar la atención y ser aprobados, aunque en el fondo son muy sensibles a las críticas y tienen serios problemas de autoestima.
- Complejo de patito feo. Lo sufren las personas que no están contentas con su aspecto físico y que suelen compararse continuamente con los demás, pensando que todos son mejores que ellos.
¿Qué puedes hacer para superarlos?
Reconoce que eres valioso. Antes que nada debes aprender a quererte a ti mismo tal y como eres. Trata de ver los aspectos positivos de tu personalidad y todas las virtudes y cualidades que tengas. Empieza haciendo una lista y apréndela de memoria.
No busques la aprobación de los demás. Actúa de acuerdo a tus valores y tu forma de ver la vida. No tienes que gustarle a todo el mundo ni sentirte mal porque piensas o eres diferente al resto.
No te subestimes ante los demás. Resalta siempre lo mejor de ti, teniendo en mente que nosotros transmitimos todo lo que pensamos y sentimos sobre nosotros mismos.
No vivas de apariencias. Acéptate primero tal y como eres y luego proyecta tu verdadero yo al mundo, sin tener en cuenta lo que piensen los demás. Una vez que logres esto, no necesitarás vivir de apariencias.
QUEREMOS SABER TU OPINIÓN: ¿Cómo te sientes con respecto a tu cuerpo y tu personalidad? ¿Te consideras una persona acomplejada? ¡Escríbenos más abajo!
Olvidando el dolor, empezando un nuevo mañana, siempre habran momentos mejores, deja que el ayer desaparezca como siempre lo hace y que el hoy cure tus heridas. Siempre habrá un mañana mejor, solamente tienes que darle la oportunidad que llene tu vida de caminos de esperanza y alegria. Adelante!
Salmos 34:5
"Los que a él acuden
se llenan de alegría
y jamás pasan vergüenzas".
Salmos 34:5
"Los que a él acuden
se llenan de alegría
y jamás pasan vergüenzas".
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